El representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, César Guedes, dijo que aceptar el retiro y reingreso de Bolivia a la Convención de Viena sobre estupefacientes “sería manosear mucho el espíritu del acuerdo”. Para Guedes el problema no es el acullicu, sino que al aceptar la figura se abriría paso a que otros países usen este antecedente para hacer otros cambios. A fines de junio de 2011, Bolivia presentó en Nueva York la denuncia a la Convención de 1961 de NNUU por su desacuerdo con el artículo que prohíbe el acullico o tradicional masticado de la hoja de coca.