En la región existe un consenso entre los analistas de que la llamada “guerra contra las drogas” ha fracasado como estrategia porque ha buscado un objetivo inalcanzable que es un mundo libre de esas sustancias. “Se partió de una meta equivocada que era un mundo libre de drogas. Eso en países de Centroamérica o Latinoamérica se mezcla con una coyuntura muy difícil que es la mano dura, y eso ha mostrado ser muy costoso e ineficaz”, explicó el analista Juan Carlos Garzón durante la V Conferencia Latinoamericana sobre Políticas de Drogas.