Brasil abrió esta semana el debate sobre a despenalización del consumo y posesión de algunas drogas, como la marihuana o la cocaína. Con retraso respecto a los países vecinos, el gigante sudamericano entra en una discusión global al juzgar en la Corte Suprema el caso de un hombre condenado por transportar tres gramos de marihuana en 2009. La ley brasileña actual trata la tenencia o consumo de drogas como un delito, aunque en pequeña cantidad contempla penas alternativas, como prestación de servicios a la comunidad.