Hace más de una década, los agricultores del centro paraguayo tuvieron que abandonar los clásicos cultivos y la cría de ganado para dedicarse al "monocultivo" de cannabis; les pagan US$ 30 por kilo. A más de 1500 km de este pueblo, que por el desmonte empieza a perder su fisonomía selvática, en Buenos Aires o Rosario esa droga genera muertes a causa de las disputas por el territorio fértil para vender lo que aquí se produce y no se consume. (Véase también: Paraguay: la tierra escondida | Una frontera caliente dominada a tiros por las mafias brasileñas)