La República Checa engrosará en los próximos meses el número de países europeos, entre ellos España y Holanda, que utilizan el cáñamo índico o cannabis para fines terapéuticos, después de que nueve sociedades de médicos y neurólogos consensuaran su necesidad. Además de los expertos, "la opinión pública checa está del lado de esta propuesta y creo que la mayoría piensa que debemos hacerlo", declaró Jindrich Voboril, coordinador nacional antidroga del Gobierno checo.